jueves, 23 de febrero de 2012

GRACIAS


No podía dejar de escribir ésto , tras el tocho que me mandé ayer.

Gracias, a toda la gente que me apoyó y la que ahora me aguanta la vela.
 La gente de mi familia, y la gente con la que elegí construir familia. A todos mis padres.

Gracias a mis compañeros de carrera, todos aquellos de los que fuí "amiga de toda la vida"  hasta que se termina el curso... y con una maleta en cada mano queda en tu corazón la sonrisa, la ternura y el recuerdo.

A Paty a Luigi, Evangelina, Pablo.  Un quinteto irrepetible de Internado.
A la gente de Tacuarembó, del hospital de Tacuarembó en aquél 2003.
A los del Hospital de Rivera.

A TÍ, por estar ahí en el 16 sucuchado, siempre que necesité alguien que me dijera "vas a poder hacerlo".



A mis compañeros de generación de residencia, por pelear codo con codo, por cambiarme guardias, por hacerme bromas, por aprender juntos,  juntar bronca juntos y por chincharnos tambien...no tengo más que buenos recuerdos de todos ellos, lo digo con el corazón.

A los "nuevitos" que entraron antes de que me fuera...por darme la oportunidad de ser "un poquito" docente, "un poquito" piola, "un poquito"...algo.
No llegué a conocerlos mucho ni a todos, pero créanme que descubrí cosas con ustedes.
A Ana y a María...por ser las primeras con las que me dí cuenta de que me gusta ésto de intentar trasmitir lo poco que se sabe, hablando hasta por los codos.

A TODOS MIS PROFES.  Todos, desde el principio. (A Hermida y a Berhouet, por los encares, incluso al alto rezongón, y a ése bajito que dice que "no es profesor ni de piano")
A todos los del "Green Hospital"
Por la buena voluntad.
Por enseñarme.
Por la paciencia.
Por ponerme los puntos sobre las íes.
POR TODAS ÉSAS HORAS DE NERVIOS EN UNA SALA DE OPERACIONES pidiéndole a cada santo personalizado:  "por favor que ésta bestia no se lleve puesto el colédoco, por favor..."
Sé que costó, sé lo que cuesta, siempre lo supe y siempre lo aprecié.
A todos, los que apostaron por mí.  Los de adultos y los de pediátrica.

Al Hombre de las Legendarias Chiviteadas.

A mis compañeros de guardias, de tantas guardias, tantas operaciones.
Al Patón que roncaba tanto que no me dejaba dormir, a Pablo que no hacía ruido y había que acercarse a ver si no estaba muerto. A Ale, al otro Ale, y al Ale abogado tambien!
A Justino, sus bromas y su música para dormir.
A Claudia y Cecilia porque era una gozada en verano, lo poco que se podía dormir en la guardia ¡poder sacarse la ropa!  :-)
A Teresa, por todas las horas de charlas. A las tres Adrianas, las quirúrgicas y la administrativa.
A Dolly, querida Dolly.

A las legiones de enfermer@s, desde los pisos hasta la Emergencia, desde el quirófano hasta el Economato, desde el Internado hasta el mismísimo último día.
A l@s que me instrumentaron la ambitorpeza.
A tod@s las que estuvieron, dieron una mano , enseñaron, rezongaron, y hasta taparon cagadas.
A TOD@S ELL@S.  L@s que dieron porculo, tambien. Tambien enseñaron.

A la gente de Administracion que nos llevaba los papeles y por fin cobramos!!
A los chicos del server de la biblioteca, por los gigas de música que nos bajamos del emule con el Luis...

A la gente de comunicaciones...ejem...ahora tienen un poquito menos de trabajo ;-) 

Gracias, a los que nos cocinaban nuestro "rancho" diario y el de las guardias, (los guisolfos de lentejas son...espectaculares!!) y a la gente del comedor y su amabilidad. A Ferreira y sus sonrisas casi diarias. Cuidate el corazon, Ferreira...

Y especialmente gracias a tí, paciente de las guardias , de las habitaciones, de las salas de operaciones, de los consultorios.
Porque al confiarme tu cuerpo, tu salud y tu vida me diste lo mejor que tengo.  


1 comentario:

  1. ¡Menudo bagaje de vida!
    Estar cara a cara con la vida... y con la muerte es una oportunidad especial para aprender y crecer
    Esto ES experiencia. Y es TUYA, te pertenece y te engrandece.
    Gracias por compartir.

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